Por cierto, os diré que hay trucos para quitarse los olores de los pescados y demás. Confesión directa de una amiga mía que ha trabajado mucho tiempo en una pescadería. Si uno se lava bien las manos (andaaaaa) con agua y jabón y tras ese lavado se restriega por todas las manos un limón (ahí bien a fondo), se van los olores como si nunca hubiesen estado. Ya está, desvelado el secreto de la familia, vamos al lío, ¿quién se apunta?
¿QUÉ NECESITAMOS PARA ESTA RECETA?
* Una tabla para cortar.
* Cuchillo o tijeras para limpiar y cortar los chipis.
* Un machaca-ajos.
* Una espátula de madera.
* Una olla para meterlo todo (con tapa).
INGREDIENTES
* 1 kg. de chipirones (sin limpiar).
* 6 cucharadas soperas de aceite de oliva.
* Media cabeza de ajos (unos 6-8 dientes medianos).
* Vaso y medio de vino blanco (de cartón, pirriaca... sin piedad!!!).
* 1 Vaso de agua del grifo, del chorro o envasada.
* 1 pizca de perejil picadito fino.
* Sal al gusto.
Con los chipis al natural...
O con los chipis ya limpios...
como cambia la cosa!!!!
De acompañamiento serviremos además un poco de arroz boooooomba.
Opcionalmente, si queréis darle un toque más "negro", tinta del propio chipirón que venden envasada y congelada también en el super. Yo no la usé... quería evitar "estragos" con la dentadura....
ELABORACIÓN
* Aquí viene el drama de la receta: limpiar los chipirones. Confieso que yo soy muy remilgadita (y maniática, eso también) para los olores, así que en las fotos me veréis con unos guantes de nitrilo (azules, de estos sin talco que usan los dentistas y podólogos) toda puesta, en plan "Anatomía de Grey" diseccionando bichitos... al principio iba de fina, luego ya me he puesto rollo pescadería total, ahí sin remilgos!!! Tengo que decir que al cabo de medio kilo de chipirones se te quitan todos los prejuicios...
* Para limpiarlos, tiraremos de las patitas (tentáculos en el mundo real) para fuera. Una vez extraídas, vamos a quitar la "pluma", vamos, es como un plastiquito (yo muy técnica siempre) que va por el interior del chipirón. Finalmente, metemos ahí la mano (o lo que le quepa,... sigo muy técnica) por dentro y extraemos las tripillas y residuos... Sí, y seguimos hablando de comida. Es que soy muy gráfica para describir las cosas y confieso que aquí me estoy cortando de decir muchas cosas....
Foto del chipirón a punto de la disección
Separamos el saquito, del rejito y al saquito
le quitamos la "pluma" (en la parte baja de la foto)
* Para limpiar el rejito, quitaremos las bolsitas de tinta de los lados (son como dos ojos negros...) y luego, quitaremos del centro del rejo la "boca" del bicho... sospecho que es el culo del bicho, pero vamos a pensar que es la boca, ¿ok? Es como un trozo duro y punzante poco agradable de encontrar una vez cocinado todo.
En esta foto se aprecia mejor la bolsa de tinta
en la parte superior del rejo. Eso todo, fuera!!!
* Una vez retirados los desechos, metidos en una bolsita y tirados con un buen nudo a la basura, limpiamos con agua (otra vez) los chipirones y los partimos en trozos grandecitos. Reservamos.
* Pelaremos los dientes de ajo y los machacaremos en un mortero o con nuestro amigo el machaca-ajos de Ikea.
* Pondremos una olla al fuego con las 6 cucharadas soperas de aceite de oliva (un buen chorro) y los ajos y sofreiremos ligeramente, sin que los ajos se lleguen a dorar, sólo que den un poco de sabor.
* Añadiremos los chipirones cortados y escurridos (cuidado que el aceite caliente en contacto con el agua salta y quema!!!) y rehogaremos un par de minutos hasta que cojan un poquito de color.
* Seguidamente añadiremos el vaso y medio de vino blanco y dejaremos que evapore el alcohol del mismo.
Foto artística del vaso de vino:
el mundo a través del cristal y
después de una borrachera
Y para dentro con él!!!
* Agregamos una pizca de sal, añadimos agua hasta cubrir los chipirones completamente y dejaremos a fuego medio, semi-tapados y revolviendo a intervalos regulares durante 30 minutos. Más o menos ése el tiempo que tardaron en hacerse los míos, siempre es bueno probar y que estén blandos pero no pasados. Casi al terminar corregimos de sal, por si nos hemos quedado cortos.
* Picamos con la tijera y en un vaso un poco de perejil... aquí, me he pasado cuatro pueblos.
* Cuando llevemos 15 minutos cociendo los chipirones, colocaremos otra olla al fuego con un poquito de agua y retiraremos de la olla de los chipis como 2 cucharones de líquido añadiéndolo a nuestra nueva olla donde vamos a cocer el arroz bomba. Dejaremos cocer durante 20 minutos. Pasado ese tiempo escurriremos bien y reservaremos para servir usando unos moldes... los moldes de los muffins!!!!
Agua y arroz
Al agua ya le hemos añadido los dos
cucharones de salsa de los chipis
Aspecto final: si hubiésemos puesto la tinta del
chipirón en la salsa habría quedado arroz negro
Ajajáaaaaa
Tacháannnnnn
* Serviremos en un plato los chipirones en su salsita, espolvoreamos con un poquito de perejil finamente cortado (y pimienta, si os da por ahí) y al arroz que tendrá el sabor de los mismos podemos adicionalmente rociarlo con más salsa... Esta es la pinta que tenían nuestros chipis!!! El sabor increíble y el olor... demasiado bueno para poder describirlo, me quedaría corta!!! Ahhhh, igualitos que los de mi madre :-) que es la autora de la receta.
Antes de emplatar, quedan en su jugo
con poca salsita pero muy concentrada, ummm
Espero que os guste la receta y si
la hacéis o queréis comentar algo siempre podéis hacerlo dejando un
comentario aquí en el blog, por Facebook eel grupo "Cocina Para Dummies" o en Twitter en @CocinaDummies. Muchas gracias por seguirme!!!